Francisco Palacios

El Volcán de Cumbre Vieja “Desde la erupción a la reflexión

La lava surgida del Volcán de “Cumbre Vieja” continúa arrasando las relaciones sociales, vecinales, familiares y profesionales provenientes de un elemento esencial para la vida: la casa y la explotación (la vivienda y el negocio). De repente, sin avisar más de dos mil personas, entre los que se encuentran titulares registrales, propietarios, copropietarios, arrendatarios, usufructuarios, socios, titulares catastrales, acreedores hipotecarios, tributarios, de la seguridad social, titulares con título insuficientes, pequeños empresarios, comerciantes, meros ocupantes se ven afectados por un dramático acontecimiento que previsto o imprevisto no podría haber sido evitado.

Aproximadamente 3.000 construcciones son víctimas de su “muerte prematura” por causas naturales. Afortunadamente la labor científica y preventiva de geógrafos, sismólogos, vulcanólogos facilita que los cuerpos de seguridad del Estado desalojen a los vecinos con orden y rapidez. Por su parte, el Registro de la Propiedad y Mercantil pasa a cumplir un fin distinto a su esencia original. Se convierte en institución primordial a la hora de colaborar en investigar y aclarar la gran casuística jurídica surgida de la nueva situación. Es por lo que la revista Registradores de España realiza al titular de la oficina registral de La Palma una serie de preguntas sobre el papel del Registro de la Propiedad en estos momentos.

¿Qué pensaste cuando el Volcán de “Cumbre Vieja” hizo su aparición?

Que geólogos, vulcanólogos, sismólogos llevaban más de un mes advirtiendo sobre esta posibilidad. Sabíamos que un enjambre sísmico se estaba produciendo en el término municipal de “El Paso”. Su buena labor científica y preventiva es digna de ser resaltada.

¿Cómo fue el día siguiente en la oficina registral?

Busqué en la oficina alguna ley, doctrina, antecedente registral que me orientara sobre la inédita situación. Incluso investigué en los libros del Registro si existía algún asiento registral que se refiriera a erupciones anteriores. Encontré datos interesantes en la Legislación sobre Registros Destruidos y obras de compañeros muy conocidos: Derecho a la vivienda digna en la ley del Suelo de 2008, de D. Jesús González Pérez (Cuadernos de Derechos Registral); Registro de la Propiedad y Urbanismo, de D. Rafael Arnaiz Eguren y la doctrina, recogida por D. José Manuel García, de los artículos 110, 79, 80 y 82 de la Ley Hipotecaria sobre hipoteca, indemnización y cancelación de asientos registrales por destrucción total o parcial del inmueble. A primera hora de la mañana me llamó nuestra decana nacional, María Emilia, para mostrarme su apoyo, indicarme como actuó el compañero de Lorca en una situación similar de desastre y manifestarme la conveniencia de transmitir la total disponibilidad del Colegio Nacional de Registradores y de la Oficina Registral de Santa Cruz a la hora de facilitar las certificaciones registrales y cualquier tipo de asesoramiento a los afectados.

¿Te dirigiste a algún representante público?

Inmediatamente ofrecí colaboración a varios representantes públicos (consejero de Justicia, delegado del Gobierno, directora Insular, presidente del Pevolca, presidente del Cabildo, …). En días sucesivos me llamaron varios miembros de la Junta para indicarme que en la página web oficial del Colegio Nacional se había creado un Geo-Portal específico para informar sobre la situación en La Palma. Me consta que la publicidad de la herramienta tecnológica fue inmediata y eficaz. Igualmente el Decanato Nacional y los Autonómicos hicieron rápidamente visibles, en los medios de comunicación, su colaboración con los afectados. Desde el primer momento hubo una magnífica coordinación con los miembros de la Junta de Gobierno del Colegio Nacional y la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública.

¿Cuándo llegaron los primeros afectados a solicitar las certificaciones registrales sobre las fincas destruidas?

Al cabo de cuatro días aproximadamente. Lo que me permitió, mientras tanto, reestructurar las tareas dentro de la oficina con el objetivo de facilitar las consultas y la entrega de las certificaciones registrales con carácter inmediato. No tenía idea si se iba a producir una avalancha en masa de peticiones y consultas. Teníamos que estar preparados ante cualquier contingencia. Gracias a que la oficina registral está dotada de un gran personal se evitaron colas y demoras.

“Dentro del Derecho Urbanístico existen procedimientos, sistemas y normativa que pueden ayudar a construir el marco jurídico adecuado sobre la zona arrasada por la lava”

¿Qué actitud ves en los afectados?

De incertidumbre, shock, tristeza… No existen palabras para describir a personas que de repente lo han perdido todo. Menos mal que gracias a los Cuerpos de Seguridad del Estado el desalojo fue ordenado desde el primer momento. Lo cual es de destacar y reconocer. Todos hemos visto, alguna vez, situaciones similares que se lleva por delante muchas vidas.

¿Cuál es su mayor inquietud?

Después de leerle la certificación registral, prueba plena que acredita su titularidad, e informarles del Real Decreto-Ley de 5 de octubre de 2021 sobre ayudas y solicitud de moratorias, me realizan preguntas propias de su situación de incertidumbre. La mayoría versan sobre la vigencia de su derecho de propiedad. Igualmente les asesoro sobre la oportunidad de acompañar este documento fehaciente de aquellos otros acreditativos del destino (residencia habitual, comercial, turístico u otros usos) de su inmueble a los efectos de presentarlos en la Oficina de afectados ubicada en los Llanos de Aridane.

¿Sobre qué otras cuestiones se interesan?

Los representantes de plataformas de afectados, titulares de explotaciones y, especialmente, agricultores se interesan por el destino futuro del terreno ocupado por la colada, en qué situación quedan los que no tengan la finca registrada, como se distribuirá la ayuda pública, si en la isla existen casas suficientes para ser realojados, cuál será el importe de la indemnización en el caso de ser expropiados… Pensemos que en la isla de La Palma construir sobre una fajana o antigua colada no es algo descabellado. En cualquier caso, son cuestiones que exigen un trabajo multidisciplinar donde estén representantes de los afectados, ingenieros, geólogos, arquitectos, urbanistas, autoridades municipales, autonómicas, estatales, juristas. Dentro del Derecho Urbanístico existen procedimientos, sistemas y normativa que pueden ayudar a construir el marco jurídico adecuado sobre la zona arrasada por la lava.

¿Cuáles son las dimensiones del terreno ocupado por la colada?

Un poco más de 10 kilómetros cuadrados. Pensemos que la isla de La Palma mide aproximadamente 723 kilómetros cuadrados, de los que 250 kilómetros cuadrados están destinados a parques y reservas naturales. En La Palma existe un total de 20 entornos dentro de la red canaria de espacios naturales protegidos. A pesar de tener una orografía y geología peculiar el palmero decidió, desde hace muchos años, habitarla y cultivarla con gran esfuerzo e ingenio.

¿Cuántas certificaciones registrales se han entregado hasta hoy?

Habría que distinguir las que se entregan personalmente y por correo electrónico (200), de aquellas otras que solicita el Consorcio de Compensación de Seguro, vía FLOTI, una vez que le hemos ayudado a identificar la finca (320). Las certificaciones a su vez acreditan derechos de naturaleza diversa (pleno dominio, copropiedad, usufructo-nuda propiedad, hipoteca…). Son datos en continua actualización.

¿Has intervenido en algún medio de comunicación?

Sí. Es conveniente y necesario informar a los afectados constantemente de la situación en la que se encuentran. Igualmente he participado en reuniones con el mismo fin. En estos casos, de la “tormenta de ideas” siempre surgirá alguna que nos ayude a enforcar adecuadamente el futuro de los afectados.