Los registradores han desarrollado una constante labor de servicio público, sabiéndose adaptar en cada momento a los cambios sociales, hasta convertirse en pleno siglo XXI en un referente en la aplicación de las nuevas tecnologías en su trabajo diario.
En el libro La Historia del Colegio de Registradores de España, su autor, Antonio Pau, recoge que sistemáticamente la Junta directiva de la Asociación de Registradores acudía a saludar a los nuevos ministros y les reiteraba el anhelo de los registradores de tener un Colegio oficial. El nombramiento de Cantos Figuerola como ministro de Justicia, que había sido director general de los Registros, será definitivo para lograr un Colegio profesional.
A los 20 días de ser nombrado ministro, anuncia que el proyecto del Colegio de Registradores podía darse por hecho. El 18 de mayo de 1934 el ministro de Justicia, Cantos Figuerola, y el presidente de la República, Alcalá Zamora, firmaban el Decreto de creación del Colegio Oficial de Registradores de la Propiedad de España.
A través de sus 90 años de historia, el Colegio de Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles, ha tenido diferentes sedes que han permanecido abiertas a la sociedad con el objetivo de ofrecer cada día un mejor servicio a los ciudadanos.
En los primeros días de 1936 tiene lugar el cambio de sede a un piso alquilado en la calle de los Caños número 2, junto a la Plaza de la Ópera. Durante la Guerra Civil el Colegio se trasladó primero a Burgos, a la calle San Juan número 56, y desde 1938 a Vitoria, a la calle Olaguíbel número 12, y posteriormente a la calle Postas número 25. Cuando el Colegio vuelve a Madrid, se instala primero en la calle Eduardo Dato número 21, y desde enero de 1940, en otro número, el 6, piso séptimo, de la misma calle, que entonces se llamaba Avenida de José Antonio.
En 1965 se inaugura la sede colegial de Príncipe de Vergara 72, con asistencia del ministro de Justicia, Antonio María de Oriol y Urquijo y el presidente del Tribunal Supremo, José Castán Tobeñas. El ministro destacó que las nuevas oficinas de los registradores dotaban a Madrid de unas instalaciones modelo en su género.
A través de sus 90 años de historia, el Colegio de Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles, ha tenido diferentes sedes que han permanecido abiertas a la sociedad con el objetivo de ofrecer cada día un mejor servicio a los ciudadanos
Tras casi 40 años en la sede de Príncipe de Vergara, el día 2 de abril de 2004 se produjo el traslado definitivo de los servicios centrales del Colegio de Registradores a la nueva sede de Diego de León 21, que fue inaugurada el 8 de junio por el entonces ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar.
Con ello se concluía un proceso de búsqueda, selección y acondicionamiento de un edificio que cumpliera con las exigencias de espacio demandado por el crecimiento de los diferentes departamentos colegiales y que permitiera la incorporación de sistemas de comunicación de última generación. La ejecución de las obras se desarrolló a lo largo de seis meses y requirió una intervención integral del edificio, manteniéndose de la primitiva distribución el núcleo central de ascensores y escaleras.
El resultado final reflejó de manera fidedigna el propósito que animaba al Colegio al iniciar el cambio de sede y que permitía su alineación con los más modernos centros de producción existentes en el mercado.
Ahora, tras la rehabilitación integral del edificio de la calle Príncipe de Vergara 70, culmina un proceso que tiene como misión satisfacer las necesidades del Colegio de Registradores durante los próximos años, con la mirada puesta en aportar soluciones y contribuir a solucionar los grandes desafíos a los que se enfrenta la Institución.
