“Soy una convencida de la utilidad de la mediación como medio adecuado de resolución de controversias”

Usted ha sido electa como presidente de la Unión Internacional de Abogados, cargo del que tomará posesión el próximo octubre. ¿Es usual ese alto protagonismo de la mujer en la abogacía internacional?

A partir de mi toma de posesión como presidente, a final de octubre próximo, seré la segunda mujer en la historia de la Unión Internacional de Abogados-UIA en ocupar el puesto desde su fundación en 1927. Que en casi 100 años tan sólo hayamos sido dos, evidencia que hay mucho camino por andar para visibilizar a la mujer en la abogacía internacional. Si miramos a la composición de la Asociación, en 2014 tan solo el 24% de los socios eran mujeres, y en 2020 -último dato con el que cuento- tan sólo había subido al 30%. Dicho esto, el hecho de que quien presidirá la asociación después de mi será otra mujer -en este caso una norteamericana-, es una buena señal de que se avanza en la buena dirección.  

Presidenta de la Corte de Arbitraje de Madrid. ¿Las sentencias del Tribunal Constitucional acotando el orden público como causa de anulación de laudos supondrán un aumento del arbitraje? 

El arbitraje es un medio de resolución de conflictos que tiene ya tradición en nuestra práctica, pero sigue siendo de uso minoritario. Las empresas con actividad internacional están acostumbradas a incluir convenios arbitrales en sus contratos, porque el arbitraje es la garantía de un foro neutro. No es el caso en empresas con giro doméstico. Pero más allá de las sentencias que se habían dictado por el TSJ de Madrid cuya doctrina el Tribunal Constitucional ha venido a corregir, hay otros “mitos” sobre el arbitraje (como su mayor coste) que pueden tener mayor incidencia en su escaso empleo. Creo que tenemos que redoblar los esfuerzos de difusión y formación, y que la ciudadanía conozca mejor este método eficiente, garantista y transparente.

“La política me parece una noble tarea, cuando te lo planteas como la dedicación de una etapa de tu vida al servicio público y puedes reincorporarte luego a tu actividad profesional”

Presidenta del Centro de Mediación Empresarial. ¿Qué opinión tiene de la mediación que trata de promover en su ámbito el Colegio de Registradores? 

Soy una convencida de la utilidad de la mediación como medio adecuado de resolución de controversias. Pese a un aparente conocimiento público generalizado, al profundizar nos damos cuenta de que existe confusión entre mediación y otros ADRs distintos, y, en ese sentido, al igual que respecto del arbitraje, resulta necesario un esfuerzo de difusión y formación. La mediación tiene el viento a favor, en la medida en que las instituciones de la Unión Europea han hecho una apuesta firme por esta como herramienta eficaz para evitar el colapso de los tribunales por carga de trabajo. La iniciativa del Colegio de Registradores en este ámbito es del máximo interés y se une a los esfuerzos de otras instituciones. Con iniciativas como estas es como podremos incorporar poco a poco la mediación -al igual que otros ADRs y fórmulas mixtas- a nuestra tradición jurídica. 

Sus hermanas Loyola (dep) y Ana han sido ministras. ¿La veremos a usted en el Consejo de Ministros?

La política me parece una noble tarea, cuando te lo planteas como la dedicación de una etapa de tu vida al servicio público y puedes reincorporarte luego a tu actividad profesional. Lamentablemente en España la obsesión de escrutar, criticar y calificar cualquier actividad posterior como fruto de las “puertas giratorias” -prejuicio que desde los años 80 no ha hecho si no empeorar- hace que me parezca un sacrificio enorme. En todo caso, no me he planteado nunca que haría si se me ofreciese la oportunidad. No soy de hacer lucubraciones de ficción.