«La Institución Registral permite hacer efectivo el contenido social de la propiedad al que se refiere el art. 33.2; dotar de transparencia a nuestras empre- sas para que puedan cumplir la función que el art. 38 les tiene encomendado, y dar contenido al art. 128 cuando afirma que toda la riqueza del país en sus diversas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general»

El año 2007 el Colegio de Registradores creó el premio Gumersindo de Azcárate para reconocer la contribución al Estado social y democrático de Derecho de personas e instituciones. Y se tomó el nombre de este eminente jurista por su trayectoria de lucha por las libertades públicas, su compromiso político por el fin del caciquismo y su apuesta por encontrar una vía entre la revolución y el conservadurismo social.

Este letrado de la DGRN, eminente krausista, fue presidente de la primera Junta Facultativa de la Institución Libre de Enseñanza, y del Instituto de Reformas Sociales y a él se debe la Ley de Represión de la Usura, que lleva su nombre y que se mantiene vigente. Los registradores mantenemos vivo su compromiso con el ciudadano, luchando, muchas veces contra corriente, por la erradicación de las cláusulas abusivas en las hipotecas.

Este premio en sus sucesivas ediciones ha sido entregado a defensores siempre de la libertad: a Enrique Múgica, a Luis Díez-Picazo, a Mario Vargas Llosa, a Francisco González. Pero me van a permitir que recuerde especialmente a tres premiados:

Fernando Henrique Cardoso, presidente del Brasil, que mostró una enorme sensibilidad social en su mandato, que entendió el valor de la Institución Registral, y se sirvió de ella promoviendo la registración de las favelas, permitiendo que entraran en el tráfico jurídico y económico del país. Así, además de un hogar proporcionó a sus habitantes un potente instrumento para su desarrollo económico y social.

José Manuel Durão Barroso, entonces presidente de la Comisión Europea. Los registradores tenemos una clara vocación internacional, y en Europa no podemos olvidar que los registros mercantiles están interconectados con el resto de registros mercantiles de Europa, a través de BRIS. Y que este mecanismo es el aprobado en el art 30.10 para la interconexión de las bases de datos de titularidades reales, que desarrolla la V Directiva contra el Blanqueo de Capitales y Financiación del Terrorismo, en la que todos sumamos. Ojalá pronto nos interconectemos también con los registros de Hispanoamérica, con quienes estamos unidos a través de la asociación IPRA-CINDER

Los ponentes de la Constitución que todavía están con nosotros, grandes juristas los tres, recibieron también este premio que hoy, en el 40 aniversario de nuestra Carta Magna, la Junta de Gobierno del Colegio de Registradores de España y la Junta Autonómica del Decanato de la Comunidad de Madrid, acordaron conceder a las Cortes Generales.

El pasado mes de marzo, la Junta de Gobierno tuvo el honor de ser recibida en el Congreso de los Diputados por su presidenta, que también preside la Comisión Nacional para la conmemoración del 40 aniversario de la Constitución y en esa visita le manifestamos el compromiso de los registradores de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles con la Constitución que nos trajo el reconocimiento de nuestros derechos y el establecimiento de las libertades públicas.

A esta Constitución que ha permitido a los españoles el periodo más largo de convivencia en paz y libertad, los registradores como garantes de la Institución registral, le debemos que nos haya vuelto a anclar en la modernidad como lo hizo la progresista ley hipotecaria de 1861.

Y no sólo porque el art. 9.1 nos recuerda que los ciudadanos y los poderes públicos estamos sujetos a la Constitución y al resto del Ordenamiento Jurídico, sino especialmente por su párrafo tercero en el que se declara que la Constitución Española garantiza la seguridad jurídica.

La seguridad jurídica, en su vertiente preventiva, cuenta con la Institución Registral para hacerla efectiva.

Institución que es también un instrumento para el desarrollo material de otros preceptos constitucionales. Así permite hacer efectivo el contenido social de la propiedad al que se refiere el art. 33.2; dotar de transparencia a nuestras empresas para que puedan cumplir la función que el art. 38 les tiene encomendado, y dar contenido al art. 128 cuando afirma que toda la riqueza del país en sus diversas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general.

«No se puede desconocer que la historia del éxito español -y hay que hablar de éxito si miramos con serenidad lo que se ha conseguido en estos cuarenta años- se ha debido a la capacidad de sus responsables políticos de llegar a acuerdos, de distinguir los terrenos de disenso, propios de las democracias pluralistas, con las zonas básicas de consenso, que permiten la estabilidad de las grandes naciones, y España lo es»

E incluso el principio de igualdad, al permitir el acceso a la información de todos los ciudadanos, evitando las asimetrías de la información, y la información privilegiada que auspicia el sistema de cargas ocultas (esto es sin reflejo registral).

Y también, no podemos ocultarlo, ha acogido sin discriminación a las registradoras, que hoy ocupamos no sólo el 46% de las oficinas registrales sino también el 70% de los cargos representativos del Colegio.

Señora presidenta, en esa visita de la que agradecemos su afectuosa acogida nos reafirmamos los registradores en la decisión unánime, junto al Decanato Autonómico de Madrid, de conceder en su edición de 2018 el galardón que más valoramos a las Cortes Generales, coincidiendo con el 40 aniversario de la Constitución de 1978, a las Cortes continuadoras de las que aprobaron el texto que hoy conmemoramos y garantes de su plena vigencia y desarrollo.

En los diputados y diputadas, en los senadores y senadoras de hoy queremos homenajear a aquellos que fueron capaces, hace 40 años, de hacer política con letras grandes y conseguir mediante el diálogo, la transacción y el sentido de la responsabilidad y, ¿por qué no?, el patriotismo, un gran acuerdo nacional, nuestra Constitución.

Es este el momento, señora presidenta del Congreso, de hacer elogio, de la actividad pública, reivindicando el papel de sus señorías, de la política, tan necesaria no sólo para la convivencia sino también para el progreso económico y social de España.

No se puede desconocer que la historia del éxito español -y hay que hablar de éxito si miramos con serenidad lo que se ha conseguido en estos cuarenta años- se ha debido a la capacidad de sus responsables políticos de llegar a acuerdos, de distinguir los terrenos de disenso, propios de las democracias pluralistas, con las zonas básicas de consenso, que permiten la estabilidad de las grandes naciones, y España lo es.

La legítima aspiración de las distintas fuerzas políticas a hacer realidad un determinado modelo de sociedad, no puede hacer olvidar que el respeto a la ley es la única garantía de la convivencia; y que es un ejercicio de responsabilidad potenciar aquello que nos une, como la Constitución que hoy celebramos, las instituciones democráticas que la misma garantiza o la posición de España en el mundo, con Europa y América como ejes permanentes

Este premio que va a entregar nuestra ministra de Justicia en nombre de los registradores de España, supone nuestro reconocimiento y gratitud a las Cortes Generales, a los diputados y diputadas, senadores y senadoras que las integran, y nuestro compromiso con el orden constitucional en el 40 aniversario de la Constitución.