Desempeñando su trabajo de forma anónima desde sus registros o participando en las labores corporativas, son muchos los registradores que contribuyen diariamente al fortalecimiento de la Institución Registral en beneficio de la ciudadanía.
Continuamos en este número con las páginas dedicadas, dentro del 160 Aniversario de la Ley Hipotecaria, a reconocer la labor callada y discreta desempeñada por los registradores en su quehacer diario al frente de las oficinas registrales, donde se convierten en auténticos protagonistas de la función social que desde la Institución Registral se ofrece a los ciudadanos.
También se pretende recordar a los registradores que además de su trabajo diario, dedican gran parte de su tiempo a las labores corporativas ejercidas desde el colegio profesional y desde sus decanatos autonómicos y territoriales. En este sentido incluimos a continuación diferentes artículos que hacen memoria de destacados registradores que han ejercido en Andalucía, Asturias, Cantabria o Murcia.
La conmemoración de esta efeméride es buen momento para hacer mención a los registradores que han sido reconocidos recientemente por el Ministerio de Justicia con la Cruz de San Raimundo de Peñafort, Cruz Distinguida de Primera Clase, con motivo del aniversario de la proclamación del Rey Felipe VI, entre los que figuran Antonio Luis Álvarez, Ignacio Burgos, Carlos Celestino, Enrique Español, Begoña Longás, Alicia López-Tormos, Belén Merino, Hermes Rego, Rafael Robledo o María de los Ángeles Ruiz.
También destacamos a otros compañeros con una reconocida trayectoria en el Cuerpo de Registradores como Cristina Martínez, María Luisa Moreno Torres, Juan Jiménez de la Peña, Francisco Gómez Jené, Juan Luis Gimeno, Juan Carlos Rubiales, Ernesto Calmarza, Diaz Marquina, María Luisa Irurzun, Fernando Restituto, Edgar Gascón, María Victoria Tenajas, Adoración Madrid, Marta Cavero, Rafael Calvo, Raquel Sancho, Carmen Posada, Cuca Simó, Fernando Llopis o Manuel Matas.
En su quehacer diario al frente de las oficinas registrales, los registradores se convierten en auténticos protagonistas de la función social que desde la Institución Registral se ofrece a los ciudadanos
Estos son solo algunos ejemplos de otros muchos registradores que con su trabajo diario prestigian a una institución que lleva 160 años sirviendo a los ciudadanos españoles para proteger sus derechos e intereses.
PROMOCIÓN DE 1970
En la sede de los Registros de Madrid tuvo lugar el acto de celebración del 50 aniversario de la promoción de 1970, aplazado en varias ocasiones por la pandemia, organizado por Pilar Rodríguez, censor-interventor y directora del Servicio de Previsión Colegial. Entre sus integrantes se encontraban dos de las registradoras pioneras en el acceso al Cuerpo de Registradores: María Jesús Torres Cortel, que fue la primera decana autonómica de los registradores de Galicia, y Rosa María Rebollo. A la reunión asistieron también algunos familiares en representación de los registradores fallecidos.
El acto contó con la participaron de la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública, Sofía Puente; la decana del Colegio de Registradores, María Emilia Adán; el secretario del Colegio, José María Ramírez-Cárdenas; el director del Servicio de Coordinación de Registros Mercantiles, Jorge Salazar; el director de Bases Gráficas, Gabriel Gragera y el vocal Ignacio González.