En este año tan especial, quiero dedicar mis palabras en este 8 de marzo a ensalzar el papel que la mujer he tenido en esta dura pandemia que estamos atravesando. No solo por las miles de médicos, enfermeras, madres, profesoras, cuidadoras de residencias, empleadas de los registros de la propiedad y mercantiles, empleadas de supermercados y tiendas abiertas al público y un largo etcétera que comprendería a todas las mujeres, que han sido las verdaderas “esenciales” de la situación, gestionando su actividad laboral, con la organización de la familia, con el cuidado de los mayores, compaginando en definitiva su trabajo, su familia y la actitud ante la situación. Todas ellas han sido, como digo, las mejores gestoras, las auténticas, las que han permitido sobrellevar esta complejísima e inédita situación de una manera un poco más humana para todos. Creo que la sociedad se ha dado cuenta de su papel esencial y de su enorme valía, compaginando el trabajo, o el teletrabajo con la atención a los niños y a los mayores, procurando que a estos no les falte la ayuda necesaria cuando por su vulnerabilidad no podían salir de casa. Nos hemos metido de lleno en las nuevas tecnologías y hemos sabido gestionar hogares con niños 24/7, hemos aprendido a mantener nuestras relaciones sociales y familiares, aunque fuese por Zoom o por Teams, y sobre todo no hemos tirado nunca la toalla. La situación, por complicada que sea, nunca vencerá a la mujer como nexo de unión entre generaciones, ni como núcleo de la organización familiar y laboral. En esta celebración de marzo del 2021, creo que ya no tenemos nada que demostrar a la sociedad, y espero que TODOS nos hayamos dado cuenta.
Mercedes Ríos