“Si algo ha propulsado este Gobierno es la justicia social”
Tras su llegada al cargo de portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Patxi López nos habla en esta entrevista de su trayectoria política, de los objetivos que se marca en esta nueva etapa y del trabajo realizado por el Gobierno para mejorar la vida de los ciudadanos tras la emergencia sanitaria y las consecuencias provocadas por la guerra en Ucrania.
Con su reciente nombramiento como portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados vuelve a la primera línea en un tiempo de turbulencias económicas y políticas. Aparte de su cualificación, ¿es la experiencia un grado que se busca con su elección?
Iniciamos una nueva etapa en la que lo que queremos hacer es contar lo que hace este Gobierno. Llevamos varios años trabajando para superar una emergencia sanitaria y ahora trabajamos para hacer frente a las consecuencias de la guerra. Hemos adoptado medidas para que familias, empresas, cada sector afectado, tenga ayuda de este Gobierno para salir adelante y los que hemos asumido ahora responsabilidades venimos precisamente a contar eso, que no nos hemos olvidado de nadie.
¿Qué objetivos se ha fijado en su nueva responsabilidad como portavoz?
Como le decía, hacer llegar el trabajo que los 120 diputados y diputadas de este grupo, pero también el partido y el Gobierno están realizando. Tenemos que desmentir a un Partido Popular que está dispuesto a todo, no por mejorar la vida de los ciudadanos, sino por llegar al poder.
Ingresó en las Juventudes Socialistas de Euskadi en 1975 y en el Partido Socialista de Euskadi en 1977. ¿Cómo valora la trayectoria de la sociedad española y vasca en el tiempo transcurrido desde entonces hasta hoy?
España y Euskadi han avanzado mucho. En el caso de Euskadi nada tiene que ver la sociedad de los años 70 con la de hoy, especialmente desde que conseguimos derrotar a ETA y recuperar nuestra libertad, pero es que España también ha progresado. Hoy la gente vive mejor, tiene un médico al que acudir, un aula en la que estudiar, protección social que hace más fácil el día a día, unas pensiones dignas. Todos y cada uno de estos avances tienen la firma del partido socialista.
De su larga trayectoria política, ¿cuál es el desempeño del que se siente más orgulloso? ¿Y cuál es el que le gustaría borrar?
Ser Lehendakari es el mayor honor que puede tener un ciudadano vasco. Fue cumplir el sueño de generaciones de socialistas y además fue la legislatura en la que acabamos con ETA.
No borraría nada porque sin fallos y errores no se podrían apreciar los aciertos.
A diferencia de Francia o Italia, en donde los partidos tradicionales han desaparecido, en España parecen tener más resiliencia. ¿A qué cree que es debido? ¿Está regresando el bipartidismo?
En España el PSOE es el partido que ha vertebrado el país desde la transición. Somos el partido de los trabajadores y siempre hemos estado del lado de los más desfavorecidos. Si algo ha propulsado este Gobierno es la justicia social. No digo que los compañeros socialistas franceses o italianos no hayan trabajado en esta dirección, pero quizás haber transformado tanto este país en los últimos cuarenta y cuatro años nos permite que la sociedad haya reconocido el trabajo que tantos compañeros han hecho desde el Gobierno de España hasta en el último pueblo del territorio y se sientan identificados con nuestro proyecto de país.
“Los ciudadanos necesitan sentir cerca sus instituciones y la mejor forma que tenemos de hacerlo es abriendo espacios donde las decisiones sean consensuadas entre el Gobierno central, las autonomías y por qué no decirlo también las diputaciones y ciudades”
¿Cómo valora usted, que fue Lehendakari del Gobierno Vasco, el modelo de cogobernanza impulsado por el Gobierno durante los últimos años en su relación con las comunidades autónomas?
El diálogo es fundamental en un país diverso y descentralizado que se estructura en comunidades autónomas. Los ciudadanos necesitan sentir cerca sus instituciones y la mejor forma que tenemos de hacerlo es abriendo espacios donde las decisiones sean consensuadas entre el Gobierno central, las autonomías y por qué no decirlo también las diputaciones y ciudades. Las necesidades en los diferentes niveles o los proyectos que se pueden poner sobre la mesa son diferentes, pero comparten el mismo objetivo. Tenemos que trabajar juntos en pos de un objetivo común para hacer que el ciudadano viva mejor.
La inflación en España se situó en agosto en el 10,5%, con los alimentos en el nivel más elevado desde 1994. Para paliar esta situación, el Gobierno ha adoptado una serie de medidas para ayudar a los ciudadanos y a los sectores que más están sufriendo la subida de precios. ¿Cómo valora el impacto de estas actuaciones? ¿Será necesario implementar nuevas iniciativas?
El Gobierno ha desplegado ayudas para amortiguar el impacto económico de la guerra que se da en Europa. Hemos bajado el IVA de la luz, el IVA del gas, hemos puesto un tope al precio del gas para que el chantaje que Putin está haciendo con esta fuente de energía no afecte al recibo final de los consumidores. Hemos puestos miles de trenes gratuitos para que sus usuarios tengan una carga menos y puedan desplazarse a estudiar o trabajar de forma gratuita. Además, el Gobierno de Pedro Sánchez está pagando parte de los costes del transporte en el metro o en los autobuses en las ciudades, para que también bajen sus tarifas. Bonificamos con 0,20€ cada litro de gasolina que cualquier conductor adquiera. Hemos dado también ayudas al transporte, a furgonetas, camiones. Las pensiones no contributivas han subido también para que quienes menos tienen tengan algo más con lo que hacer frente a la subida de los precios. Este Gobierno no se ha olvidado de nadie y va a seguir trabajando para implementar todas las medidas que sean necesarias para hacer frente a esta situación y esas medidas están funcionando.
Los registros de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles fueron declarados servicio público esencial durante el estado de alarma. Ante el establecimiento de la moratoria legal de hipotecas adoptada por el Gobierno, los registradores mantuvimos operativo, de modo totalmente telemático, el depósito de modelos en el Registro de Condiciones Generales de Contratación, manteniendo la transparencia en la contratación, y facilitando su concesión mediante el suministro de notas de localización, asumiendo en caso de vulnerabilidad, su coste de modo extraordinario. En el mismo sentido, tras la erupción del volcán de la Isla de La Palma ofrecimos un servicio permanente de atención a los ciudadanos, de modo telemático, incluso mediante videoconferencia, para proveer a los ciudadanos de certificaciones acreditativas de la propiedad de sus derechos. ¿Qué valoración hace de la función social de una institución, la registral, con más de 160 años de historia?
Cada parte del engranaje del que formamos parte ha jugado un papel fundamental. Nunca nos habíamos enfrentado a las situaciones que estamos viviendo y con tan poco margen de maniobra. En Europa hace más de 70 años que no hay una guerra de las dimensiones de la que estamos sufriendo. Hace más de 100 años que no vivimos una crisis sanitaria como la que hemos soportado. En tiempos donde como decía, los ciudadanos necesitan certidumbre, como ocurrió en La Palma, donde pierden absolutamente todo, vuestro papel es fundamental.
PERFIL CULTURAL
Su abuelo trabajaba en el cine Mar de Portugalete. ¿Le resulta evocadora la visión de la película Cinema Paradiso?
Absolutamente, cada vez que la veo vuelvo a la última fila del cine Mar donde, al salir de clase, me sentaba con mi abuela a ver la película de turno.
¿Cuál es su película favorita?
Es difícil quedarte con una sola pero siempre vuelvo a ver Léolo de Jean-Claude Lauzon, me calma su poesía.
¿Un libro que le haya marcado?
Cien años de soledad, fue la primera vez que tuve la sensación de vivir en un libro, de estar en Macondo y ser testigo de lo que pasaba.
¿El museo al que siempre vuelve?
El Bellas Artes de Bilbao, con una colección espectacular.
¿La música que no puede faltar en su dispositivo?
Toda
