El Museo Picasso Málaga presenta una retrospectiva de esta pintora santanderina comprometida con su modo particular de vivir y de crear hasta el final, que traspasó los límites de los estereotipos de género.


La exposición monográfica que se acaba de inaugurar en el Museo Picasso Málaga ofrece al visitante, a través de 90 obras recopiladas, un recorrido cronológico por las diferentes etapas en la vida artística de la pintora santanderina María Blanchard (1881-1932), y tiene como objetivo poner de relieve la riqueza simbólica, el compromiso social, la complejidad formal y el carácter innovador propios de su trabajo en su relativamente corta trayectoria artística. 

En conjunto, su obra destaca por la contribución al movimiento moderno, siendo la primera mujer en España que utilizó sistemáticamente el método cubista para construir imágenes y en experimentar en sus composiciones con la fragmentación y las múltiples perspectivas, por lo que su contribución al movimiento moderno es particularmente notable. Ello, unido al dominio técnico que demostró y al respeto que se ganó entre sus contemporáneos, la convirtieron en una figura de referencia. 

RECONOCIDA Y ADMIRADA

La dama del abanico. Foto: Belén Pereda

Los pintores André Lhote y Diego Rivera atribuyeron a María Blanchard las obras más bellas del cubismo, mientras que Picasso la recomendaba a coleccionistas y marchantes, y reconoció su influencia en composiciones como Muchacha con aro. Y aunque destacó en el ámbito cubista, su obra no se quedó en este estilo, sino que evolucionó hacia una figuración muy personal y distintiva, manteniendo una visión auténtica y reconocida en el círculo de arte de París. Pero como reconoce Miguel López-Remiro, director artístico del museo, “pese a ser reconocida y admirada entre sus compañeros como una importante artista dentro del movimiento cubista y la Escuela de París, en ocasiones la historia del arte no ha dado cuenta de esa importancia o no ha conseguido trascender desde ese relato”. 

La singular combinación de elementos geométricos y la diestra simultaneidad de perspectivas confieren una personalidad original tanto a sus representaciones más abstractas de la primera época como a los desarrollos figurativos de su obra posterior a 1920. El repertorio temático que ha dejado de maternidades, escenas domésticas, niños o trabajadoras, refleja una sentida preocupación femenina por la vulnerabilidad de la condición humana y el poder evocador de las emociones, aspectos que se refuerzan con un impecable dominio técnico y un evidente interés por la historia y la tradición de la pintura europea.

Los pintores André Lhote y Diego Rivera atribuyeron a María Blanchard las obras más bellas del cubismo, mientras que Picasso la recomendaba a coleccionistas y marchantes, y reconoció su influencia en composiciones como Muchacha con aro

La comulgante. Foto: Archivo fotográfico Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía

Con esta exposición, comisariada por José Lebrero, exdirector artístico del Museo Picasso, la institución vuelve a poner en valor a la mujer artista del siglo XX, tras anteriores muestras dedicadas a Sophie Taeuber-Arp (2009), Hilma af Klint (2013), Louise Bourgeois (2015), Somos plenamente libres. Las mujeres artistas y el surrealismo (2017) y Paula Rego (2022). En esta ocasión, se pretende reivindicar el trabajo de una pintora como Blanchard, figura crucial en la gestación del movimiento cubista, que logró desafiar los límites impuestos por los estereotipos de género con su arte, a pesar de que su consistente obra nunca fue lo suficientemente valorada en un contexto cultural que creía en la inferioridad femenina artística. Ahora, la pintora cántabra sobrevive al olvido con esta retrospectiva para hacer historia. 

Museo Picasso, Málaga • Hasta el 29 de septiembre de 2024


Cómo conocer mejor el legado de la artista

De forma paralela a la exposición, el museo ha organizado una serie de actividades complementarias que permitirán conocer mucho mejor la obra de una creadora que se erige como una de las primeras artistas femeninas en explorar las potencialidades del lenguaje cubista, dejando así una de las más significativas contribuciones a este movimiento vanguardista.

Se podrá hacer un recorrido por la muestra en el que los participantes tendrán la oportunidad de aproximarse a la artista, figura clave en el arte español del siglo XX, y abordar su obra cubista y figurativa de forma colaborativa a través de la observación. Igualmente, podrán sumergirse en algunas de las obras donde tendrán la oportunidad de reconocer escenas cotidianas y personajes familiares, así como explorar la técnica del dibujo a pastel, tan característica en las creaciones de Blanchard.

María Blanchard.

En el taller del museo se realizarán también de manera dinámica retratos de personas cercanas y conocidas, proponiendo una experiencia enriquecedora y creativa, donde los asistentes podrán plasmar una visión personal de sus seres queridos mientras exploran técnicas artísticas inspiradas en la obra de la artista santanderina. 

También se organizará un taller de storytelling -el arte de contar relatos- a cargo de Belén Torregrosa, en el que a través de la lente creadora de María Blanchard, se explorará el poder de vivir las preguntas, la importancia de una mirada atenta y la magia del punto de vista en la comunicación.

Y en Cuadros con Vida tendremos la oportunidad de sumergirnos en la obra de esta destacada artista, recorriendo las salas del museo en busca de composiciones cubistas que revelen objetos cotidianos en nuevas perspectivas. El taller ofrece también la oportunidad de crear su propio bodegón en formato pop-up para generar efectos de profundidad y dinamismo. Esta experiencia creativa promete no solo acercarnos al legado de la artista, sino también fomentar la experimentación y la expresión personal con el lenguaje cubista.

Finalmente, se han organizado dos encuentros María Blanchard, paradigma de pinceles sin voz, a cargo de María José Salazar, doctora en Historia del Arte y conservadora; y María Blanchard y el genio femenino, por Xon de Ros, investigadora de la Facultad de Lenguas Medievales y Modernas de la Universidad de Oxford, en los que se abordarán algunos de los temas tratados en la exposición.