Después de 163 años de Ley hipotecaria y de 90 años de vida colegial, la nueva sede del Colegio de Registradores acogió la primera reunión amplia con presencia únicamente de mujeres. Una fiesta de mujeres sin idea de exclusión de los hombres, sino de celebración.


La revista Registradores de España organizó un encuentro con motivo del Día Internacional de la Mujer, que en esta ocasión tuvo un significado muy especial porque tras la toma de posesión de la nueva promoción de registradores, la cifra de mujeres trabajando al frente de un Registro supera por primera vez en la historia a la de hombres.

En el conversatorio sobre la igualdad en los registros de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles, que estuvo presidido por la ministra de Igualdad, Ana Redondo, participaron la decana del Colegio de Registradores, María Emilia Adán; la secretaria general para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Sofía Puente; la presidenta de Redeia, Beatriz Corredor y la periodista del eldiario.es, Esther Palomera. El debate estuvo moderado por la corresponsal política de El País, Anabel Díez. Al acto estaba prevista también la asistencia de la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública, Ester Pérez Jerez, al que al final no pudo acudir.

Ana Redondo y María Emilia Adán. Foto: Sophia Arenas
Ana Redondo y Sofía Puente. Foto: María López Jurado

Anabel Díez comenzó el debate dando la palabra a María Emilia Adán, que destacó que “el Colegio de Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles es un espacio de igualdad. Entre la cultura de este colegio está la cultura de igualdad. Todos nos vemos como profesionales y la prueba de ello es que estamos aquí después de un proceso que ha sido largo, que ha sido ascendente al compás de los tiempos. En 1941 ingresaron cuatro mujeres registradoras, y fueron las primeras que entraron en los que se llaman altos cuerpos de la Administración del Estado. Luego se fueron sumando notarias, jueces, fiscales… Desgraciadamente, esta tendencia ascendente de las compañeras que iban entrando quedó suspendida con el texto refundido de la Ley Hipotecaria de 1944-46 hasta la ley de 1961. Pero el carácter luchador que tenemos las registradoras llevó a un grupo de compañeras a presentarse a la oposición alegando una disposición transitoria del decreto de Alcalá Zamora, y una de ellas lo consiguió”.

El acto de este año ha tenido un significado muy especial porque tras la toma de posesión de la nueva promoción de registradores, la cifra de mujeres trabajando al frente de un Registro supera por primera vez en la historia a la de hombres

Adán continuó señalando que “podemos decir que el Colegio de Registradores hoy, tras la última promoción, es un poquito más femenino. Es importante para todos saber que esta cultura de la igualdad está dentro de toda la corporación, no solo somos las mujeres, sino son los hombres los que también participan de esta cultura de la igualdad, porque sin ellos no nos hubiéramos podido ir desarrollando”.

La decana de los registradores resaltó que “lo que marca la apuesta por la igualdad en profesiones como la nuestra no es la entrada, que es por mérito y capacidad, lo importante es cuando has entrado”. En este sentido manifestó que “yo entré en 1988, la primera promoción paritaria, y los compañeros te veían como una profesional más, y eso era importante también porque no era así en el resto de la sociedad. Y la prueba de esa cultura de la igualdad está también en que los cargos orgánicos del Colegio, el poder de decisión, está encomendado a las mujeres desde hace muchos años. En 1994 fue elegida la primera decana territorial de Galicia, y en 2017 entre yo, y hubo un momento en el que las decanas territoriales eran el 80 por ciento de la Asamblea de Decanos, en 2017. La elección de los órganos colegiales se produce por elección directa de todos los compañeros, es decir, si los compañeros no hubieran querido, en un Colegio que entonces era mayoritariamente masculino, nunca las mujeres hubiéramos podido llegar a los puestos de decisión”. 

Foto: Sophia Arenas

La decana reconoció también ser consciente de que “esta cultura de igualdad que tenemos en el Colegio de Registradores no es así en todos los sitios, y por eso tenemos que ayudar a que otras mujeres tengan esa misma consideración en los ámbitos en los que se mueven, la consideración de persona”. 

“La cultura de la igualdad está dentro de toda la corporación, no solo somos las mujeres, sino son los hombres los que también participan de esta cultura de la igualdad, porque sin ellos no nos hubiéramos podido ir desarrollando”
María Emilia Adán

A continuación, Anabel Díez afirmó que “el Colegio de Registradores es un remanso de igualdad. Verlas a ustedes aquí podría dar la impresión de que ya está todo hecho, ver a tantas mujeres de éxito, podría dar la impresión de que ya no hay obstáculos que remover para conseguir la igualdad que está en la Constitución y en nuestras leyes. ¿Está casi todo hecho?, preguntó.

Adán señaló que “a la sociedad le queda todavía un largo camino por recorrer, sobre todo a las personas más desfavorecidas. Además, no podemos aislarnos solo en España, que es también, llamémoslo así, un oasis de igualdad. A mí me sigue doliendo la herida de Afganistán, me sigue doliendo que las mujeres no puedan ejercer sus derechos. Y nosotras, las registradoras y los registradores, somos personas que vivimos en el mundo, y somos personas que tenemos nuestro compromiso social y atendemos por igual a hombres y mujeres, porque en nuestras oficinas también está el principio de igualdad de todos, cualquiera que sea su condición, económica o social, todos tienen el mismo nivel de acceso al Registro”. 

En 2017 María Emilia Adán se convirtió en la primera mujer en acceder al decanato del Colegio de Registradores en toda su historia, y tras seis años al frente de la Institución dice no haber estado sola. “Nosotros nos presentamos a las elecciones como un equipo, y el equipo es el que ha servido de motor de todos los proyectos y de toda nuestra presencia en la sociedad, un equipo magnífico que está muy comprometido con todos estos valores”. 

MUCHO POR HACER

Esther Palomera planteó en su intervención un breve marco global de la situación, donde afirmó que “hoy es de justicia recordar, aunque las cifras muchas veces nos abruman, que una de cada diez mujeres menores de 20 años ha sido obligada en el mundo a mantener relaciones sexuales, que las mujeres dirigen solo el 2 por ciento de las 500 mayores empresas que hay en el mundo en cuanto a términos de cifra de negocio y que si juntáramos los parlamentos, los congresos y las cámaras legislativas de todo el planeta, solamente una de cada cinco representantes sería mujer. Por lo tanto, aquí somos todas unas privilegiadas, creemos que hemos andado muchos caminos, abierto muchas puertas, pero tanto aquí como en el conjunto del planeta nos queda mucho por hacer”. 

Palomera destacó que “en España, que somos uno de los países donde más hemos avanzado en políticas de igualdad, hemos conocido recientemente datos que sostienen que los hombres, un 44 por ciento de ellos, consideran que las políticas de igualdad les están discriminando a ellos. Este es un dato que demuestra, sin ninguna duda, la distancia que hay entre la asunción de un discurso teórico, y las consecuencias reales de ese discurso. Y creo que hay que poner un poco el foco en eso”. 

Muchas veces, continuó diciendo, “nos asalta la duda de cómo podemos implicar a la mitad del mundo en una conversación que para ellos les es ajena. Yo creo que siempre hay que recordarles que tenemos conocimiento, que tenemos formación y que tenemos ganas de hacer exactamente lo mismo que hacen ellos, que no somos una cuota si no la mitad de la población del mundo”. El feminismo, dijo, “no es el odio a los hombres ni lo contrario del machismo, es simplemente el reconocimiento de que las mujeres debemos tener el mismo derecho y las mismas oportunidades que tienen ellos, y sobre todo que socialmente se nos trate con el mismo respeto que se les trata a ellos”. 

La periodista finalizó su exposición indicando que “hoy es un día para recordar que los derechos, por mucho que en este país algunos de ellos ya los tengamos conquistados, no permanecen para siempre y pueden estar en peligro”. 

IMPLICAR A LA OTRA MITAD

Por su parte, Sofía Puente manifestó en sus palabras sentirse “muy orgullosa de haber sido directora general de mujeres tan extraordinarias como las que están reunidas hoy aquí. Somos la mitad de la población pero necesitamos a la otra mitad para que sea cómplice y darnos el apoyo que necesitamos para llegar a los sitios que por el porcentaje que somos nos corresponde. Y esto es algo que sí pasa en el Colegio de Registradores, porque cuando se ha sometido a votación en dos ocasiones quién iba a liderar este Colegio, no ha habido ninguna duda de que tenía que ser una mujer. Además, la iniciativa de esta mesa de debate, ha procedido también de un hombre, de Antonio Tornel, que es el director de la Revista Registradores, que siempre está buscando iniciativas para resaltar la importancia que las mujeres tienen en el mundo, y ha dedicado dos números especiales con motivo del 8M donde por primera vez la revista de los registradores se llamaba Registradoras de España. Siempre hay hombres detrás de nosotras que nos animan, impulsan y nos hacen estar en el lugar que nos corresponde”. 

Foto: Sophia Arenas

Puente señaló también que “la Administración pública en general es un oasis. Se entra por mérito y capacidad, vemos como de manera progresiva las mujeres somos las que aprobamos mayoritariamente las distintas oposiciones y partimos de una situación muy privilegiada. Pero fuera de este oasis en el que nos encontramos hay discriminaciones que sufren las mujeres no solo por su condición de mujer, sino por su condición de discapacidad, por su condición de inmigrante… Es decir, hay mucha discriminación fuera del ámbito de la Administración pública. Y nosotras como mujeres privilegiadas que somos, lo que tenemos que hacer es abanderar la lucha por otras mujeres que se encuentran en esa situación y aprovechar el altavoz de tener puestos de responsabilidad para impulsar políticas que hagan que las discriminaciones sean cada vez menos”. 

“Las mujeres y los hombres que tenemos puestos de responsabilidad tenemos que reflexionar para impulsar y llevar a cabo políticas que nos permitan ser cada vez más iguales”
Sofía Puente

La secretaria general finalizó su intervención diciendo que “España es un país que ha avanzado muchísimo en políticas de igualdad, estamos mucho mejor que en países de nuestro entorno, pero todavía hay muchas cosas por hacer, y las mujeres y los hombres que tenemos puestos de responsabilidad tenemos que reflexionar para impulsar y llevar a cabo políticas que nos permitan ser cada vez más iguales”. 

LIDERAZGO FEMENINO

Beatriz Corredor recordó que ya en su promoción fueron más mujeres que hombres, y todo debido al mérito y a la capacidad. “Aquí no hay ni trampa ni cartón y los tribunales son exigentes con todas y se demuestra lo que una es delante de muchas personas que te valoran por lo que sabes”. Entre las cosas que quedan pendiente por hacer, Corredor señaló que sería necesario “ayudar y apoyar a las mujeres en las etapas en las que tienen más problemas de desarrollo en su carrera profesional. Por eso yo siempre digo que la conciliación no solo va de madres, va de todos, y eso ayudará a que en los puestos de responsabilidad haya también más mujeres. La legislación no nos impide llegar a ninguna parte, pero la falta de legislación sí. Y de hecho la prueba es que hemos necesitado una Directiva europea para que interioricemos que hacen falta también cuotas en el ámbito de las empresas y del poder económico”. 

Beatriz Corredor y Sofía Puente. Foto: Sophia Arenas

Respecto a la pregunta de Anabel Díez sobre cómo valoraba la presencia de juristas al frente de las empresas, la presidenta de Redeia indicó que “los juristas hacemos una aproximación a la realidad basada en una capacidad de análisis de todo tipo de regulación aplicada a las instituciones. Esta capacidad de análisis te permite ir de un planteamiento general, que es una normativa, a un caso particular con un sentido práctico de resolución de problemas, que es lo que se hace cuando se aplica una ley que es para todos a un caso concreto. También habló de la forma de ejercer el liderazgo femenino, y recordó estudios que dicen que cuando hay consejeras hay más compromiso por parte del consejo en temas de sostenibilidad, en temas de protección de derechos humanos, y que los equipos son más empáticos y se hace un trabajo más trasversal, más colaborativo y menos competitivo. «Ese es mi objetivo, que haya más responsabilidad que competencia y que la responsabilidad sea la que decida la jerarquía y no la jerarquía la que decida la responsabilidad, ya que esto hace que los equipos sean más permeables. El liderazgo es masculino o femenino, pero no necesariamente las mujeres tienen un liderazgo femenino, ni los hombres uno masculino. No depende de que seas hombre o mujer, sino del estilo que tengas, la empatía, la escucha, la colaboración, se trata de algo más transversal. Las juristas aportan mucho a los consejos, aportan sentido común, visión estratégica y de contexto, y tenemos un sentido muy práctico de resolución de problemas”.

“La conciliación no solo va de madres, va de todos, y eso ayudará a que en los puestos de responsabilidad haya también más mujeres”
Beatriz Corredor

FORMACIÓN Y PUESTOS DE RESPONSABILIDAD

Para representar a las registradoras el conversatorio contó con la participación de la número uno del escalafón, Carmen de Grado, de la que las participantes destacaron que ha sido y sigue siendo una referencia y una inspiración en el Cuerpo de Registradores. De Grado recordó que cuando ingresó en el año 1976 “éramos siete mujeres registradoras en activo. Para mí fue algo muy natural, era la única mujer de seis hermanos, y mi madre, que era feminista sin saberlo, nos trataba a todos por igual y su único afán era que estudiáramos”. En este sentido, comentó que “para que la mujer pueda llegar a una posición de liderazgo es elemental la formación. Sin formación es difícil llegar a puestos de responsabilidad”. También quiso poner de relieve que “no solamente aumentamos el número de registradoras desde el año 1976 hasta ahora, que es exponencial, sino que también ha aumentado el número de mujeres en el personal de los registros. Y todos nos empleamos, también los registradores, en contratarlas en igualdad de condiciones por formación, por talento, por capacidad y con igualdad salarial. Yo creo que ahí está el enfoque para que la situación de la que gozamos en España se pueda extender. Sin formación no hay posibilidad de liderazgo ninguno, ni de hombres ni de mujeres”. 

Foto: Sophia Arenas

“Cuando empiezo a hacer balance de mis casi 48 años desde que estoy en activo y miro para atrás -terminó de Grado- veo que la Institución Registral está formada por todos, hombres y mujeres, ahora mayoritariamente por mujeres, y veo que es una Institución viva, moderna, enraizada en la sociedad a la que sirve y en continua evolución, y creo que todas las aquí presentes estamos muy orgullosas de formar parte de ella”. 

También participaron en la mesa de debate en representación de las registradoras, dos integrantes de las últimas promociones, la cubana Yadira Borruel, y la española de origen rumano, Alina Nica, que mostraron sus experiencias y su visión en materia de igualdad. Borruel comentó que “en el Cuerpo de Registradores he encontrado mi casa, he encontrado el sitio donde me encuentro plenamente a gusto. Además de en esta profesión, en el Cuerpo he encontrado mi ecosistema, por decirlo de alguna manera. Porque cuando hablamos de desigualdad o de discriminación, esto no se limita al ámbito de mujer-hombre, y yo como persona que viene de un país extranjero, en algún momento he sufrido la discriminación no solo por ser mujer, sino también por ser extranjera. Y, sinceramente, en esta profesión y en este Cuerpo eso no lo he sufrido nunca, siempre me he sentido parte y espero que lo que me encontrado aquí se extienda por toda la sociedad y que el feminismo no solo luche y se encargue de la igualdad de género, sino que seamos más largas de miras y tratemos también de que esa igualdad se extienda a todos los campos, y que la igualdad de oportunidades y los derechos sean los mismos para todos sin ningún tipo de discriminación”.

“Para que la mujer pueda llegar a una posición de liderazgo es elemental la formación. Sin formación es difícil llegar a puestos de responsabilidad”
Carmen de Grado

Alina Nica reconoció que “el día que me presenté al examen después de seis años tras esperar la nacionalidad española, estaba un poco nerviosa por que no sabía cómo se iba a tomar el Tribunal el hecho de que se presentara una persona de origen extranjero, ya que era la primera vez que ocurría en la historia de nuestro Cuerpo. Y si bien es cierto que en los últimos veintidós años que estoy residiendo en España nunca he sufrido ningún tipo de discriminación en ninguno de los trabajos que he tenido ni en la Universidad, aun así tenía el temor de cómo se lo iba a tomar el Tribunal. Y cuando aprobé el primer examen, me dio mucha confianza en mí misma y pensé que lo podía lograr. Ahora formo parte de un Cuerpo que me ha recibido y acogido muy bien, y en el que por medio de nuestra vocalía de Asuntos Europeos he podido cumplir uno de mis sueños, que era colaborar con Naciones Unidas, y lo hago con mi compañera Pilar a través de varios proyectos, uno de ellos en el que estamos luchando por la igualdad de género. Estoy muy contenta de aportar mi granito de arena para que se logre efectivamente esta igualdad”. 

IGUALDAD Y DEMOCRACIA

Finalmente, Anabel Díez dio paso a la ministra de Igualdad, Ana Redondo, de la que comentó que no ha llegado en un momento fácil, porque el feminismo está viviendo una situación complicada que puede quizá alejar o perturbar todos los proyectos que tiene por la igualdad. 

En este sentido, la ministra comenzó respondiendo a una pregunta “que me ha interpelado, ¿dónde estamos y qué falta por hacer? A nivel internacional todo, porque hay muchos países que siguen en el Medievo, y en los que las mujeres continúan estando en una situación preterida y con conculcación absoluta de sus derechos, como en Afganistán y en tantos otros países. Y lo estamos viendo también en las guerras, donde las principales víctimas son las mujeres”. 

A nivel internacional hay mucho por hacer, resaltó Redondo, “pero yo quiero ser optimista ya que España tiene un liderazgo muy potente a nivel internacional y sobre todo en materia de igualdad, donde somos un ejemplo que siguen otros muchos países que quieren evolucionar hacia una mayor democracia, porque cuando hablamos de igualdad no hablamos de otra cosa más que de democracia, cuando hablamos de igualdad estamos hablando del corazón de nuestra democracia, del corazón de nuestra Constitución”. 

“Cuando hablamos de igualdad no hablamos de otra cosa más que de democracia, cuando hablamos de igualdad estamos hablando del corazón de nuestra democracia, del corazón de nuestra Constitución”
Ana Redondo

La ministra también habló de la trasversalidad de la igualdad. Al respecto comentó que “no hay una igualdad en abstracto, hay una igualdad en el trabajo, hay una igualdad en la corresponsabilidad, hay una igualdad en el acceso al empleo, hay una igualdad salarial que no se cumple… Estamos hablando en definitiva de nuestra esencia de convivencia. La igualdad es eso, y el feminismo es igualdad, no es ir en contra de nadie, no es conculcar derechos de nadie, el feminismo es igualdad en esa concepción democrática, en esa concepción constitucional de la igualdad”. 

Redondo recordó que España por primera vez se sitúa como cuarto país a nivel internacional en materia de igualdad, solamente superado por Dinamarca, Países Bajos y Suecia. En nuestro país, dijo, “llevamos trabajando más de veinte años en lo que es para mí la política auténtica de Estado, que es la política de igualdad. Y hay, desde luego, unos avances importantes en materia de igualdad a nivel legislativo, como la Ley contra la violencia de género de 2004, que cumple este año su 20 aniversario”.

También se refirió al papel de la mujer en la Administración pública señalando que “los derechos fundamentales frente a las administraciones son derechos conquistados. Las administraciones públicas están obligadas con el mérito, la capacidad y la igualdad, porque no hay mérito y capacidad sin igualdad. Por lo tanto, en la función pública, en todos los organismos públicos, es la Administración la que tiene que dar ejemplo. Las que trabajamos aquí somos unas afortunadas, pero fuera de la Administración hace mucho frío”. 

Al acto asistieron registradoras de diferentes promociones y Comunidades Autónomas. Foto: Sophia Arenas

Es verdad, dijo, que “las leyes van poniendo límite a esta desigualdad y que avanzamos indiscutiblemente con leyes muy positivas, como por ejemplo la primera ley de esta legislatura, que es una Ley de paridad y presencia equilibrada. Estamos hablando de igual acceso, porque sin esto el mérito y la capacidad no existen. Y por eso tenemos que seguir celebrando y reivindicando el 8 de marzo, porque nuestra sociedad fuera de este oasis es una sociedad muy desequilibrada y desigual. No hay derechos irreversibles, y lo hemos comprobado a nivel internacional y también en nuestro país. Todos los derechos conquistados pueden darse la vuelta, lo sabéis las registradoras, lo habéis vivido en vuestra historia”. 

Por este motivo, continuó diciendo, “necesitamos un país, una sociedad donde por el hecho de ser mujer no se nos impida nada, ni tengamos que renunciar a nada. El momento no es fácil y, si soy sincera, no sé exactamente porqué tanta animadversión en algunos temas, y porqué hemos llegado a una ruptura, me resulta difícil entenderlo. El movimiento feminista siempre ha sido un movimiento aglutinador, de muy diferentes sensibilidades, de muy diferentes acentos, y eso es lo que le ha hecho rico, eso es lo que le ha hecho realmente importante a nivel internacional como uno de los movimientos de gran trasformación social”. 

La ministra de Igualdad cerró el encuentro señalando que “hemos llegado a un punto en el que es difícil conciliar las posiciones, pero yo creo que no es tan importante la posición en que nos encontremos, sino que nos encontremos. Que nos encontremos en la calle, en la reivindicación, en esa esencia democrática, la esencia de los valores compartidos como sociedad, que es la esencia de la igualdad de género. Lo importante es eso, no es tanto poner el foco en la diferencia sino ponerlo en lo que nos une. Y creo que nos unen muchas cosas, lo he comprobado hoy aquí, y esas son las cosas que son importante mantener, reivindicar y defender”. 

CUERPO PARITARIO

Al acto celebrado en la sede del Colegio de Registradores asistieron también un numeroso grupo de registradoras en representación de las casi 600 que forman parte de un Cuerpo que en estos momentos es paritario. Además de por la decana, la corporación estuvo representada por la tesorera, Begoña Beitia; la directora del Servicio de Previsión Colegial, Pilar Rodríguez; la directora del Servicio de Medio Ambiente y Consumidores, Rocío Perteguer y por la directora de Responsabilidad Social Corporativa, Dulce Calvo. También estuvieron presentes las decanas autonómicas de Madrid, Belén Merino; de Andalucía oriental, Rosario Jiménez; de Cantabria, Ana Julia Marlasca; de Aragón, María de los Ángeles Ruiz; de la Rioja, Pilar de la Oliva; de Extremadura, María Pascual; de Galicia, María Núñez y de Navarra, Raquel Ortiz de Pinedo.

Junto a ellas, participaron en el conversatorio la delegada provincial de Madrid, Elena Parejo; la colaboradora de la Revista Registradores, Belén López Espada; además de una representación de registradoras de diferentes territorios y promociones, como la número uno del escalafón, Carmen de Grado, o Ana Gómez Adeva, Belén García-Faría y Jone Fernández-Monje.

Asimismo, estuvieron presentes en este encuentro registradoras de Andalucía occidental como Reyes Muñiz y Paloma Villalobos; de Baleares, Ana del Valle; de Cataluña, Claudia Manchini; de Castilla y León, Yadira Borruel; de Castilla-La Mancha, Paloma Lombardo; del País Vasco, Begoña Ruiz Alutiz; de la Región de Murcia, Alina Nica y de la Comunidad Valenciana, Mercedes Ríos, Pilar García Goyeneche o Mercedes de Álamo.

El Colegio de Registradores entiende que las instituciones deben servir como motor para la igualdad, motivo por el que se organizó este encuentro con el objetivo de generar aportaciones y propuestas efectivas que permitan continuar progresando en una materia con la que la Institución Registral está tan comprometida.