Con este galardón el Colegio de Registradores de España reconoce la labor de una institución que a lo largo de sus casi 500 años de historia se ha convertido, como destacó el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, en “un órgano absolutamente indispensable en la arquitectura institucional de nuestro país”.
El Premio Gumersindo de Azcárate que concede el Colegio de Registradores de España y el Decanato Autonómico de los Registradores de Madrid, ha sido otorgado este año en su XIV edición al Consejo de Estado, institución que está próxima a cumplir los 500 años desde su creación en 1526 por Carlos V. El galardón fue recogido por su actual presidenta, Carmen Calvo, de manos del ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños. Los registradores acordaron por unanimidad conceder este reconocimiento al máximo órgano consultivo de nuestro país, por su defensa del Estado social y democrático de derecho como expresión de los derechos de la ciudadanía a través de sus dictámenes, mociones, informes y propuestas de reforma.
En sus catorce ediciones celebradas, el Premio Gumersindo de Azcárate ha mostrado su vocación de universalidad reconociendo a la Comisión Europea, representada por su presidente, José Manuel Durão Barroso; al escritor peruano y Premio Nobel, Mario Vargas Llosa; al ex presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso o a la Comunidad Iberoamericana de Naciones. El premio destaca también por su carácter multidisciplinar, al distinguir a profesionales o instituciones tan importantes del mundo jurídico, político, económico y cultural como las Cortes Generales, el Tribunal Constitucional, el Ministerio de Justicia, el Banco Hipotecario de España o la Real Academia Española. El galardón adopta su nombre en memoria de quien fue gran jurista y político, letrado de la Dirección General de los Registros y del Notariado y catedrático, preocupado por la reforma del Derecho y de la sociedad española.
El acto de entrega del premio tuvo lugar un año más en el Real Casino de Madrid, y hasta allí se acercaron para homenajear al Consejo de Estado con su presencia representantes de las principales instituciones del Estado, entre ellas el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido; la presidenta del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló; el presidente Mariano Rajoy o la presidenta de Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano.
Los registradores acordaron por unanimidad conceder este reconocimiento al máximo órgano consultivo de nuestro país, por su defensa del Estado social y democrático de Derecho como expresión de los derechos de la ciudadanía a través de sus dictámenes, mociones, informes y propuestas de reforma
El acto de entrega del premio comenzó con las palabras de bienvenida del director de Relaciones Institucionales del Colegio de Registradores de España, Sebastián del Rey, quien cedió la palabra a continuación a la decana del Colegio, María Emilia Adán, que en su intervención destacó que “hay una auctoritas en el Consejo de Estado que es el resultado de la suma del prestigio ganado en el transcurso de los siglos como institución, que suma el aportado por todos y cada uno de los consejeros y letrados que a título individual gozan de ese prestigio, pero también el aportado por los consejeros natos, directores o presidentes de otras instituciones y que a través de ellos suman el prestigio de las distintas academias, de la Fiscalía General del Estado, del Estado Mayor de la Defensa, de la Abogacía General del Estado, de la Comisión General de Codificación, de la Abogacía entre otras muchas instituciones, que vierten su prestigio y su bagaje jurídico y cultural también en el Consejo de Estado”.
RIGOR Y EQUILIBRIO
A continuación, el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes señaló que la concesión de este premio “conecta perfectamente la biografía de Gumersindo de Azcárate con lo que supone el Consejo de Estado en nuestro Estado de derecho”. En palabras del ministro, la institución “tiene como sentido último y como máximo órgano consultivo del Estado, ilustrar al Gobierno y a las comunidades autónomas en la labor de llevar a cabo políticas públicas para que la convivencia en nuestro país sea cada día mejor”. Se trata, dijo, “de una labor titánica que debe quedar fuera de contextos políticos concretos”.
Bolaños recordó además que, como ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, es él quien más contacto tiene con el Consejo de Estado y “compruebo con mis propios ojos como la institución hace siempre esa labor tras debates interesantes, profundos, detallados y serenos, y gracias a las personas que lo conforman, de un prestigio y autoridad indiscutibles, que mejoran sin duda la calidad de nuestras normas”.
Por su parte, la presidenta del Consejo de Estado inició su intervención agradeciendo el premio porque supone un reconocimiento del trabajo que realiza el Consejo de Estado y señaló que supone un impulso para seguir trabajando, como supremo órgano consultivo del Gobierno, con la misma dedicación, solvencia y compromiso para la mejora de las políticas públicas y en el buen funcionamiento del Estado de Derecho.
Asimismo, quiso destacar que este galardón le pertenece al excepcional equipo humano del Consejo por su riguroso trabajo diario y su esfuerzo para garantizar la seguridad jurídica y la calidad normativa. A su juicio, reconoce la importancia de la función consultiva, de la reflexión jurídica sosegada y ajena a otro tipo de debates, propia de esta casa, que garantiza que sus dictámenes estén basados en un análisis informado, riguroso, equilibrado y plural y tengan muy presente el interés general. De esta manera, se fortalece la calidad de las decisiones públicas, la transparencia y la rendición de cuentas para nuestro Estado de derecho.
RECONOCIMIENTO INSTITUCIONAL
Esta nueva edición del premio volvió a reunir a numerosas autoridades del ámbito jurídico, político y de la sociedad civil. El Consejo de Estado estuvo representado, además de por su presidenta, por un nutrido grupo de consejeros y de letrados lo que, en palabras de Carmen Calvo, “puede dar la medida de la gratitud que sentimos al recibir este premio”. Entre ellos estuvieron presentes los consejeros Miguel Rodríguez-Piñero, Paz Andrés, Fernando Ledesma, Teresa Fernández de la Vega, Benigno Pendás, Salvador González, Antonio Pau o José María Michavila. También acudieron, entre otros, los letrados Alfredo Dagnino, Jaime Aguilar, José Luis Palma, Leopoldo Calvo-Sotelo, José Leandro Martínez-Cardós, Íñigo Coello de Portugal o Víctor Torre de Silva. Tampoco quisieron perderse este acto los expresidentes del Consejo de Estado Tomás de la Quadra-Salcedo y Magdalena Valerio.
El Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes estuvo representado, además de por el ministro, por el secretario de Estado de Justicia, Manuel Olmedo; la secretaria general para la Transformación del Servicio público de Justicia, Sofía Puente; la directora general de seguridad Jurídica y Fe Pública, Ester Pérez Jerez; el abogado general del Estado, David Vilas; el secretario general técnico, Alberto García o el subdirector general del Notariado y de los Registros, Antonio Fuentes, entre otros. Por parte del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa asistieron la subsecretaria, Aida Fernández, y la secretaria general técnica, Lucía Zabía; y en representación de la presidencia del Gobierno estuvo el director de Asuntos Institucionales, Iván García Yustos.
Una vez más el evento congregó a numerosas autoridades del mundo de la Justicia. En este sentido, asistieron por parte del Tribunal Constitucional, además de su presidente, la vicepresidenta Inmaculada Montalbán y los magistrados María Luisa Balaguer, Enrique Arnaldo, María Luisa Segoviano, Juan Carlos Campo, Laura Díez o José María Macías. Por parte de Consejo General del Poder Judicial acudieron, además de su presidenta, Alejandro Abascal, Ricardo Bodas, Gema Espinosa, Bernardo Fernández, José María Fernández Seijo, María Pilar Jiménez-Bados, Luis Martín, José Antonio Montero o María Pilar Rojo. También su anterior presidente, Vicente Guilarte.
Del Tribunal Supremo estuvieron presentes su vicepresidente, Dimitri Berberoff, y los magistrados Pablo Lucas, Jacobo Barja de Quiroga, Juan Manuel Bandrés, Luis María Díez-Picazo, Ana Ferrer, Isaac Merino, Antonio del Moral, Susana Polo o Pilar Teso. Por parte de la Audiencia Nacional asistió su presidente, José Ramón Navarro, y la secretaria de Gobierno, María Jesús Fraile. Del ámbito de la Fiscalía asistieron la teniente fiscal del Tribunal Supremo, María Ángeles Sánchez Conde; la fiscal de sala jefa de la Unidad de Apoyo de la Fiscalía General del Estado, Esmeralda Rasillo; el fiscal de sala jefe de la Fiscalía Contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, Alejandro Luzón; la fiscal jefa de la Fiscalía Especial Antidroga, Rosa Ana Morán; la fiscal de sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática, Dolores Delgado; la fiscal de sala de la Fiscalía Coordinadora de Menores, Teresa Gisbert; el fiscal de sala de Cooperación Penal Internacional, Francisco Jiménez-Villarejo; el fiscal de sala jefe ante el Tribunal Constitucional, Pedro Crespo o la fiscal de la sección de lo Civil de la Fiscalía del Tribunal Supremo, Lourdes Rodríguez Rey.
También quisieron participar en el homenaje al Consejo de Estado representantes de diversos organismos e instituciones como el presidente del Consejo de Transparencia y Buen Gobierno, José Luis Rodríguez; el director general del Catastro, Fernando de Aragón; la presidenta de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, María Isabel Valldecabres o la adjunta primera al Defensor del Pueblo, Teresa Jiménez-Becerril.
Por parte de los colegios profesionales asistieron el presidente del Consejo General de la Abogacía Española, Salvador González Martín; el presidente del Consejo de General de Procuradores de España, Juan Carlos Novoa; la presidenta de la Asociación de Abogados del Estado, Lucía Pedreño o la presidenta del Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España, Marta Vall-llossera.
Para homenajear al Consejo de Estado asistieron al acto representantes de las principales instituciones del Estado, entre ellas el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido; la presidenta del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Isabel Perelló; o el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños
El acto de entrega del premio contó además con la asistencia de representantes económicos, culturales o de los medios de comunicación como la presidenta de Redeia, Beatriz Corredor; el presidente de la Asociación Hipotecaria Española, Santos González; el secretario general de la Asociación Española de Banca, Javier Rodríguez Pellitero; el secretario general de la Confederación Española de Cajas de Ahorro, Fernando Conlledo; la secretaria general de la Unión General de Cooperativas de Crédito, Cristina Freijanes; el director general de la Fundación Iberoamericana Empresarial, Miguel Ángel Cortés; el secretario general de la COMJIB, Enrique Gil-Botero; la jefa de Pintura Española del Renacimiento del Museo del Prado, Leticia Ruiz; el presidente de la Fundación Francisco Giner de los Ríos, José García-Velasco o el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España, Miguel Ángel Noceda.
Del ámbito de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento asistieron, entre otros, los viceconsejeros de Medio Ambiente, Agricultura y Ordenación del Territorio, Rafael García; de Hacienda y Función Pública, Juan Revuelta; la directora general de Vivienda y Rehabilitación, María José Pichiomarchetti; o los directores generales del Suelo, Ramón Cubián, y el de Tributos, Miguel Povedano. También asistieron el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Celso Rodríguez Padrón; la fiscal superior, Almudena Lastra; el presidente de la Audiencia Provincial, Juan Pablo González o la jueza decana de Madrid, María Jesús del Barco. Igualmente, estuvieron presentes la presidenta de la Corte de Arbitraje de Madrid, Urquiola de Palacio; la presidenta de ASPRIMA, Carolina Roca o el decano de la Facultad de Derecho de la UAM, Juan Arrieta.
“Este premio reconoce la importancia de la función consultiva, de la reflexión jurídica sosegada y ajena a otro tipo de debates, propia de esta casa, que garantiza que sus dictámenes estén basados en un análisis informado, riguroso, equilibrado y plural y tengan muy presente el interés general”
Carmen Calvo
Del ámbito registral asistieron, entre otros, los integrantes de la Junta de Gobierno del Colegio de Registradores de España y de la Junta del Decanato de Madrid, decanos autonómicos y territoriales, anteriores decanos nacionales y registradores adscritos a la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública.
El acto de entrega de la XIV edición del Premio Gumersindo de Azcárate, finalizó con las palabras de agradecimiento a los asistentes de la decana autonómica de los registradores de Madrid, Belén Merino, por atender a la invitación de los registradores y “por el cariño de su respuesta año tras año que nos permite reunir en un solo acto a las mayores instituciones de la administración pública estatal, autonómica y municipal, al poder judicial, al poder legislativo y a la sociedad civil”.
Los registradores tienen instituido desde el año 2007 este premio para reconocer a personas o entidades que promueven el Estado social y democrático de derecho y el desarrollo institucional, y con ellos la paz, la convivencia y el progreso económico y social. El acto de entrega del galardón, dirigido por el registrador de la propiedad Antonio Tornel, aumenta cada año su prestigio gracias a la excelencia de los premiados y a la asistencia de altas autoridades del Estado, así como de destacados representantes de diversas instituciones y organismos, lo que convierte a este encuentro, considerado ya como un clásico, en un homenaje al premiado no solo por parte de los registradores de la propiedad, mercantiles y de bienes muebles, sino del conjunto de la sociedad española.